Los seres vivos estamos formados de materia (biomasa), que a su vez está formada por elementos y moléculas. De hecho, la VIDA (así en mayúsculas) depende en buena parte de unos 10 elementos. Los ciclos biogeoquímicos son el conjunto de procesos que aseguran el reciclado permanente y más o menos rápido de los elementos. Es decir, gracias a ellos los elementos están disponibles para ser usados, una y otra vez, por diferentes organismos. Si la materia que forma parte de los seres vivos no se reciclara, la producción se frenaría. Sin los ciclos biogeoquímicos, la vida se extinguiría.