Dependiendo de qué sociedades de microorganismos albergamos, tenemos más o menos probabilidades de enfermar o de comportarnos de cierta forma. Por lo tanto, no somos nosotros sin nuestra microbiota, y nuestra microbiota no es nada sin nosotros. ¡Estas sociedades microscópicas que hospedamos, contienen claves imprescindibles para el desarrollo de nuevos tratamientos para prevenir y curar enfermedades!